En un mundo que no es el mio, donde jugamos a ser dios. En un mundo donde estudio, en un mundo donde no. Jugamos con fuego, mientras apagamos las llamas. Esperamos el tren, que nos llevara a nuestra estación. Estaciones primaverales, con el invierno los talones pisando, nos saltamos el otoño, nos saltamos el verano.
Para jugar a ser dios, simplemente puntuamos, al resto de la gente, a ti también te juzgamos. Leyes que adormecen a los asnos del pasado. Rebeldía susodicha, entre parajes desolados. Yacemos encadenados a sentimientos incrustados, incrustados en tu memoria, en tu vida, en tu pasado. Jugando con fuego, mientras pensamos en quemarnos. Apagamos la luz, este cuento se ha acabado
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